miércoles, 21 de mayo de 2008

Entre HuehueMoctezuma y Shaka Zulu:

La Nueva Revolución Pedagógica se planifica teniendo en cuenta las incorrectas tácticas de los líderes guerreros de la historia, más que los pocos aciertos de algunos de los escasos líderes.

Por ejemplo, el azteca Motecuhzoma Xocoyotzin o simplemente Moctezuma, nos enseña a no pactar con el imperialismo por condescendiente que se muestre. Este emperador de “mano blanda”, que por temor a ciertas creencias trató de conquistar el corazón del invasor Hernán Cortés para ganarse su confianza, quien sólo tenía en mente expandir el imperialismo europeo y la meta de arrasar Tenochtitlan, exterminando a los aztecas para saquear todas sus pertenencias y riquezas, violando a sus mujeres y masacrando a sus descendientes.

Asimismo, el gran guerrero zulú, Shaka, de África, nos enseña a no negarnos a la unidad de fuerzas aliadas, pues con su “mano dura” debilitó las numerosas tribus que podrían haber luchado contra los imperialistas británicos, y nos enseña a no confiar en aquellos imperialistas falsamente arrepentidos que ofician de espionaje a favor del imperio, del modo que él concedió a Henry Finn la posibilidad de analizar todos sus secretos.

Ni Moctezuma ni Shaka Zulu, ni los correspondientes ejemplos contemporáneos como Gandhi o el Che Guevara, ya tendrán algún efecto liberador, porque ni un extremo ni el otro nos servirán ahora contra el imperialismo. Es tiempo de integrar los antagonismos para lograr una enorme fuerza revolucionaria.

Pedagogía y no violencia, amor y no autoritarismo, respeto y no sometimiento, son los tres tesoros de la Nueva Educación Humanizada, Humanista y Humanitaria.


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domingo, 18 de mayo de 2008

Tiempo sin Retorno

Nos encontramos en un momento sumamente crucial de la historia humana, el cual ha entrado en su cuenta regresiva a partir del siglo XXI.

En el año 2000 se estableció la gran cumbre del milenio llevada a cabo en New York donde se propuso reducir la pobreza a la mitad para el año 2015, respecto al índice de 1990, es decir veinticinco años después.
Pero si hablamos sólo de niños, y no de jóvenes ni de adultos o de la tercera edad, sólo de niños... y si hablamos no de los veinticinco años pronosticados, sino sólo de un año, de un sólo año, y podríamos tomar uno cualquiera, uno al azar, por ejemplo el año 2006, durante el cual han fallecido en el mundo 9.700.000 niños por desnutrición (nueve millones setecientas mil almas en un solo año).

Claro que ésta no fue la única propuesta tratada en esta gran cumbre, sino que también se concordaron en total ocho puntos, entre los cuales se especifica erradicar la pobreza, o bien, reducirla a la mitad. Pero otro de los puntos es facilitar la educación escolar a todos los niños del planeta... pues, hoy, en 2008, tenemos que 75.000.000 de niños no cuentan con ninguna posibilidad de asistir a una escuela (setenta y cinco millones de almas sin alternativa de educación).

Para dejar bien en claro las dimensiones de este desastre, de manera más actualizada, digamos que en 2008, 10.000.000 de niños están muriendo de hambre antes de cumplir los 5 años (diez millones de almas indigentes a causa de las políticas aberrantes que rebajan al género humano).

Pero, ¿cuánto dinero se precisaría para dar de comer a estos niños y ofrecerles educación?
Teniendo en cuenta que sólo en 2005 se invirtieron 1,20 Billones de Dólares en conflictos bélicos por los recursos energéticos como el petróleo y en defensa militar, únicamente este año, se deduce que con dicho dinero no sólo alcanzaría para proporcionar alimento y educación a estos niños, sino que sería suficientes para hacerlos ricos. El dinero malgastado en un sólo año para dar de comer de por vida a estos niños.

Por supuesto que el interés de los gobiernos más poderosos que dominan el mundo no es reducir las muertes causadas por la desidia social, sino, justamente, reducir la población mundial, seguramente es por esto que han considerado que para el 2015 se reducirá la pobreza a la mitad, porque calculan que la otra mitad estará muerta para entonces.

Los pueblos unidos no podemos esperar más, debemos auto-convocarnos para reclamar a los gobiernos sensibilidad, humanismo y justicia, porque ya está siendo demasiado tarde para todo, pues cada día que pasa son 1.141 niños más que han fallecido a causa del hambre y la desnutrición.


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